domingo, 16 de noviembre de 2008

El hechizo se deshace...

Después de analizar la trayectoria del líder de la oposición, don Mariano, parece lógico preguntarse cómo le va a nuestro Presidente. A lo largo del primer mandato, hemos tenido el placer de conocer al mago de las cortinas de humo, consiguió mantener a la oposición protestando siempre por la causa equivocada, no porque la medida objeto de sus protestas fuera buena, sino porque al mismo tiempo se estaba aprobando otra más polémica.

Nos encontramos ante una persona que se ha sentado a negociar con E.T.A., entregándose a una "causa noble", hasta que se rompió la burbuja el 30 de diciembre con el atentado de la T4. ¿Hasta? Hombre, eso se pensaba después de oír a Rubalcaba afirmar : "¿quiere el señor Astarloa que digamos que el proceso se ha roto? Pues bien, evidentemente se ha roto. ¿El proceso se ha liquidado? Pues bien, evidentemente el proceso está liquidado. ¿El proceso se ha acabado? Pues bien, evidentemente el proceso se ha acabado. ETA ha roto, ha liquidado y ha acabado con el proceso de paz". Todo cambió cuando el propio Zapatero comentó que había seguido negociando. Por aquellos días Otegui era conocido como un "hombre de paz" y De Juana estaba bordeando la muerte. Sin embargo en pocos meses los dos acabaron ingresando de nuevo en prisión, el "hombre de paz" por enaltecimiento del terrorismo y De Juana para completar su condena. La imagen que quedó de esa noble lucha fue que el PP no había querido cooperar para lograr la paz y que habían roto el Pacto Antiterrorista.

Otro gran logro fue la Ley de Memoria Histórica que, entre otras cosas, obliga a retirar todos los símbolos franquistas. Ya puestos a meter el dedo en la llaga, ¿por qué no aprovechamos el revuelo para eliminar también todos los símbolos de apoyo al terrorismo? La respuesta más inmediata es que no es rentable. Los primeros levantan un poco de polémica, te sirven para pinchar un poco al PP y tienen una gran acogida en "el mundo progre". Los segundos te sorprenden en plena "causa noble", molestan a los partidos nacionalistas y lo que ya es inadmisible, te hacen perder votos. Los grandes perjudicados fueron, una vez más, los del PP que ya empezaron a sonar como 'derechona'.


Todos recordamos los comienzos de Educación para la Ciudadanía. Supuestamente su finalidad era mostrar los contenidos de la constitución y los derechos humanos, aunque la realidad que aparecía en los libros de texto era bien distinta. Por supuesto hay editoriales más serias que otras, pero en el fondo siempre aparecía una realidad orientada de acuerdo con intereses políticos. España es un claro ejemplo de lo que ocurre cuando cedes la educación a las comunidades y se pierde el sentido de universalidad. Lo que en un principio parecía una inocente asignatura que pretendía tapar las carencias de nuestro sistema educativo, acabó desvelándose como un intento de imponer un modelo de sociedad más afín a sus intereses y un nuevo golpe al Partido Popular que por resistirse acabó siendo etiquetado como anquilosado. Alguien me dijo que a los centros educativos no se va sólo a obtener un título sino a aprender a pensar. Esta asignatura rompe totalmente con eso ofreciendo sólo un modelo de realidad y presentándolo como el correcto, cuando para que una persona pueda formar su capacidad de decisión tiene que conocer todas las opciones y escoger la que más se adapta a su realidad.

Podríamos centrarnos en escenas como la legalización de los matrimonios homosexuales que pudiendo haberse tratado con naturalidad, lo más interesante desde el punto de vista electoral era dramatizar un poco y obligar a Mariano a dar la cara. No era necesario forzar un todo o nada. Temas como la posibilidad de adopción, que afecta directamente a niños, o la redefinición del concepto de matrimonio suponían un cambio suficientemente importante para la sociedad como para haberle dedicado un poco de tranquilidad. Creo que no es necesario recordar lo que supuso para el partido de Rajoy. La polémica con los estatutos fue otra de las guindas del pastel, aunque es cierto que en este caso el PP se ganó a pulso las críticas recibidas consiguiendo enfadar a unos y a otros.

Sin embargo, en el segundo mandato se está acabando la magia. Las pocas fuerzas que le quedan, Zapatero las está usando para sobrevivir a la crisis, intentando camuflarla bajo una cortina de humo que por una vez le ayudaron a poner. El que no hace tanto presumía en cada entrevista de levantar envidias en el resto de países, aparece en los últimos tiempos recurriendo a cualquier mínimo contacto para figurar en su particular "foto de las Azores". La señal más clara que hemos recibido hasta ahora de la pérdida de poder progresiva de este gran ilusionista, ha tenido lugar hace muy poco tiempo en una declaración en la que reconocía públicamente que su aparición en "la foto" se debía no a sus incuestionables méritos, sino a la intervención de Nicolas Sarkozy y George W. Bush.

Sus últimos coletazos se están centrando en demostrar que sus números aún figuran entre los mejores de la historia. Es cierto que no son tan buenos como parecían antes de las elecciones, pero como se oye en algunos debates "es que estaban en campaña electoral, ahora no se puede querer que se cumpla al pie de la letra". A este ritmo parece poco probable que alcancemos el tan esperado pleno empleo, tendremos que conformarnos con ser los mejor preparados para la crisis y en consecuencia los menos afectados. El truco de esta idea se lo copio a Rajoy que se convenció de que era el segundo campeón, entonces aunque al resto de Europa les vaya mejor nosotros seguimos estando a la cabeza. Por como se desarrollan las cosas, eso de que España puede ser un modelo para afrontar la crisis nos lo podemos estar repitiendo día y noche para darnos ánimo, pero en la cumbre no fuimos invitados precisamente con honores.

Una crisis económica es lo único que consigue que la mayoría de las personas busquen consuelo e información en expertos más o menos ajenos a la política. Este tipo de cosas son las que permiten vislumbrar la realidad presente tras tantos adornos y entender que España tiene su crisis particular camuflada bajo la global. Inicialmente se puede optar por ignorar al experto en cuestión, pero cuando se repite la idea continuamente, hasta en los más reticentes se logra un estado de duda. A partir de ahí, puedes llegar a preguntarte si el hecho de negar continuamente la crisis anunciando dinero para todos porque las cuentas nunca habían estado mejor, no sería una manera de escurrir el bulto hasta pasadas las elecciones. Te queda la duda sobre si el PP sería realmente tan catastrofista y antipatriótico o si, en realidad, toda las medidas anunciadas y ejecutadas no tenían como único objetivo dar a la gente lo que quería oír sin reparar en las consecuencias. Esta idea no parece del todo incorrecta si tenemos en cuenta que nuestro Presidente pasó de lograr un fervoroso "¡Amén!" tras cada discurso a un gesto impasible en sus días más brillantes.






2 comentarios:

Unknown dijo...

Woody Allen siempre aparece con su cara de "¿Qué hago yo aquí?", nuestro querido Zapatero debería preguntarse lo mismo. En su gobierno del "dialogo" se empecina en una idea sin escuchar a nadie y al poco tiempo, cuando la realidad le da un bofetón, con la contraria. Basta ver ¿proceso de paz? ahora si, ahora no, y el intermedio del quizás. ¿Crisis? nooo desaceleración, que suena mejor, luego ¡crisis, crisis! ¡¿como no?!.
Este es el gobierno del diálogo sí pero del monólogo interior del presidente quien no ha acabado de aterrizar en el cargo al que llegó "de rebote", una vez por un suceso trágico por todos conocido, otra por lo que pudiera considerarse un eslogan político para algunos: "todo menos el pp que sino viene la derechonaaaa!!!".
Por cuanto se refiere a Educación para la Ciudadanía para mí es un conjunto d papelitos tales como hay bloques de piedra por ahí que cada cual les da un significado u otro o ninguno. Todo eso son meros adornos como las promesas electorales... que en la práctica son los regalitos que el genio d la lámpara extravió en el camino.
Todos sabemos donde estamos, esto es España, gana y luego duerme tranquilo aunque el cielo nos caiga encima.

N-Y dijo...

Este tío es un triste que se creyó su propia "historia" y, lo más preocupante es que funcionó y ahora todo el mundo quiere ser como el: triste, limitado, mentiroso y "cazurro" en el peor sentido de la palabra.

Vaya Banda los de " la SOE"!!